AMBICION
LA CARIDAD NO ES AMBICIOSA "I Corintios 13,5 NO AMBICIONAR HONOR Gálatas 5,26 No busquemos la gloria vana provocándonos los unos a los otros, y envidiándonos mutuamente.
ALMA
Filipenses 1,23 Me siento apremiado por las dos partes: por una parte, deseo partir y estar con Cristo, lo cual, ciertamente, es con mucho lo mejor
ALMA
VALE MÁS QUE EL CUERPO Mateo 10,28 "Y no teman a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma, te- man más bien a Aquel que puede llevar a la perdición alma y cuerpo en la gehenna
GOTAS DE ESPERANZA
De Luis de Condé, uno de los más valientes generales del siglo XVII, se cuenta que, todavía niño, tuvo dudas sobre la religión. Encontraba entre sus antepasados a católicos y protestantes. ¿A cuáles seguir? ¿A qué culto atenerse? Pero Condé se puso a estudiar la religión, a leer libros de gente erudita y brilló en su inteligencia
GOTAS DE ESPERANZA
Cuando Napoleón se vio desterrado en Santa Elena y próximo a morir, hizo erigir en su habitación un altar para el santísimo sacramento. El general Bertrand se permitió hacerle observar que «aquel acto era propio de un fraile y no de un soldado y emperador». — Napoleón se incorporó en el lecho y replicó: «En mi habitación
GOTAS DE ESPERANZA
El abogado Gillemin, de París, preguntó una vez a un joven que hacía prácticas en su estudio: —Enrique, ¿crees en Dios y en su religión? — ¿Yo?
GOTAS DE ESPERANZA
Camille Bellaigue cuenta en Pie X et Rome: «Veo todavía a sus pies [se refiere a Pío X] un joven sacerdote sacudido por sollozos. Suplicaba, instaba en voz baja, como implorando un milagro. Y nunca olvidaré al padre santo estrechando con ternura aquella cabeza descarriada y repitiendo con voz fuerte: «¡La fe! ¡La fe! ¡Nada más
GOTAS DE ESPERANZA
Camille Bellaigue cuenta en Pie X et Rome: «Veo todavía a sus pies [se refiere a Pío X] un joven sacerdote sacudido por sollozos. Suplicaba, instaba en voz baja, como implorando un milagro. Y nunca olvidaré al padre santo estrechando con ternura aquella cabeza descarriada y repitiendo con voz fuerte: «¡La fe! ¡La fe! ¡Nada más
GOTAS DE ESPERANZA
Canalejas, político anticlerical, el día en que bautizaron a una de sus hijas asistió al bautizo en la parroquia. Oyó toda la misa de rodillas y después, cogiendo a su niña en brazos, se postró ante la imagen de la Virgen y se la ofreció. Escogió para madrina la esposa del doctor Muñoz. Un amigo suyo le
GOTAS DE ESPERANZA
Un niño tuvo un sueño en el que vio a una encantadora hada que, acercándose a él, extendió ante sus deslumbrados ojos preciosos juguetes y ricos regalos. Sonriente, le dijo: — ¿Te hacen feliz estas cosas? Pues podrás tenerlas si eres mi amigo. En esto apareció en escena un noble príncipe, y, extendiendo un gran vestido sobre su