AVE MARIA
La alegria que experimentaste cuando el Arcangel Gabriel, enviado de Dios, penetro en la intimidad de tu aposento, y de hinojos y lleno de reverencia ilumino tu rostro virginal con la nueva salutacion que jamas los siglos habian escuchado diciendo: Dios te salve, llena de gracia, el Señor es contigo, etcetera.
¡Que no daria para pronunciarla de cabo a cabo, a la manera de tus fieles devotos, y, si fuera posible, con labios de oro!
Y con el mas vivo anhelo de mi corazon, deseo que todas las creaturas, formando coro conmigo, repitiesen: Dios te Salve Maria, llena de gracia, el Señor es contigo, bendita Tu eres entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre, Jesus. Amen
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