GOTAS DE ESPERANZA
En el verano de 1914 Alfredo Víctor Smith era un joven policía, de servicio en Blackpool. Al estallar la guerra se incorporó en el 5º. Regimiento de East Lands, y en 1915 estuvo en Gallipoli.
Dos días antes de Navidad, en una acción de guerra, cuando había quitado la espoleta de una granada de mano e iba a lanzarla, sin saber cómo, se le cayó la granada de la mano. Dio un grito de alarma a sus compañeros de trinchera, pero se dio cuenta de que no podían ponerse a salvo con la rapidez adquirida. Dentro de unos segundos iba a estallar la granada, y no encontró más que un medio de salvados. Se dejó caer sobre la granada para ahogar la explosión y, naturalmente, perdió la vida con ello.
Le fue concedida la Cruz Victoria y la condecoración francesa Cruz de Guerra, y su heroico ejemplo de sacrificio fue citado en la orden del día del 10.o Cuerpo de Ejército francés.
«¡Era un muchacho tan amable! —escribió el jefe de policía de Blackpool al enterarse de su muerte— Todos mis hombres están afectados. Su bondad le hacía querer de todos nosotros.»
